Tertulia Unamuniana: Discurso de Unamuno en su jubilación

El miércoles 27 de septiembre, tuvo lugar en la Casa de Las Conchas, nuestra habitual tertulia, bajo el título de: ”Discurso de Unamuno en su jubilación” . La tertulia fue moderada por Luis Gutiérrez, secretario de la asociación. 

El 29 de septiembre de 1934, a la edad de 70 años se jubiló D. Miguel, pronunciando un discurso memorable en el Paraninfo de la universidad, después se dirigieron a la facultad de Filología, donde inauguraron el busto que le había realizado el escultor Victorio Macho, posteriormente tuvo lugar la comida. Acudieron a esta cita con D. Miguel, el presidente de la República Niceto Alcalá Zamora, además de otras autoridades civiles, quedando para el recuerdo la jubilación de Unamuno, como homenaje al gran profesor y rector, honra de la Universidad de Salamanca.

El acto de homenaje a Unamuno se lo debemos a su amigo y Ministro de Instrucción Pública Filiberto Villalobos. 

Este día fue un día grande de celebración en la ciudad, como no se recuerda otra igual.. 

Destacamos de su discurso, el recuerdo a los dos estudiantes muertos en una revuelta que tuvo lugar en 1903, durante su mandato como rector. Este suceso nunca fue olvidado por D. Miguel, quien había dicho que “los estudiantes son el porvenir de mañana”, y consideraba como  “sus hijos espirituales”.

La enfermedad de Raimundín

El jueves 14 de septiembre, tuvo lugar, en el Centro Documental de la Memoria Histórica, la conferencia titulada “La enfermedad de Raimundín”. Fue impartida por Juan José Zarranz-Imirizaldu, Catedrático emérito de la Universidad del País Vasco, prestigioso neurólogo, quien nos descubrió desde el punto de vista de su especialidad, las características de la enfermedad del hijo de D. Miguel, diagnosticada como hidrocefalia.

Juan José Zarranz, ha estudiado la enfermedad de Raimundín, a través de los dibujos y poemas que Unamuno dedicó a su hijo, llegando a la conclusión de que la observación del padre y sus explicaciones acerca de cómo iba evolucionando el hijo, aportan un diagnóstico certero de la enfermedad que padecía el niño y que se hace extensivo a todos los enfermos de esa misma dolencia.

Los biógrafos de Unamuno, nunca se habían adentrado en los detalles de la enfermedad, como lo ha hecho Juan Jośe Zarranz, desde el punto de vista del rigor científico, que lo acredita como neurólogo que ha tratado muchos casos como el del hijo de D. Miguel, que afortunadamente hoy no llegan al fatal desenlace al que llegó Raimundín. El hijo por el que Unamuno sintió gran debilidad, arrancándole versos desde lo más profundo de su alma.

Fotos Daniel Álvarez y Elena Díaz