Con la pena rodando por el suelo, la inmediatez del suceso y la urgente prisa del recuerdo, os dejamos este In Memoriam, dedicado por nuestro presidente Francisco Blanco a Josefina Cuesta, como homenaje de la Asociación, al que nos sumamos todos los unamunianos.
También a nosotros se nos ha muerto, como del rayo, Josefina Cuesta, con quien tantas ideas compartimos y momentos vivimos en la Asociación, cuando el tránsito de la parca carecía de significado, el abandono del mundo se nos antojaba inimaginable y el lacerante dolor por la despedida final no formaba parte de nuestras vidas.
Se ha llevado la parca una amiga unamunista y humanista; erudita y sencilla; comprometida y generosa; siempre dispuesta a implicarse y participar con toda propuesta que recibiera de colaboración en causas justas, por la cultura o a favor de la solidaridad, con empatía poco común.
Se ha ido Josefina, pero con nosotros queda mientras un hilo de vida nos permita recordar los momentos que compartimos en el Centro de la Memoria, la Sala de la Palabra y la Casa Museo Unamuno.
Entumecidos nos deja en el andén de partida, buscándola en las aulas universitarias y foros de la Memoria Histórica, por la que tanto hizo, a la espera de que la Gran Portera de la vida nos expida el billete de ida a su encuentro.