Cuando a la familia Unamuno le tocó la lotería
Unamuno nunca tuvo muy claro que la lotería les tocase de verdad y no fuese una maniobra orquestada por alguien: «¿Querrás creer que todavía no acabo de creer lo de que a tu madre le tocase el premio gordo? Por todas partes veo maniobras para atraerme a esa y que ceda en mi campaña». (Carta a su hijo Fernando).