Unamuno celebrity: entre prestigio y popularidad.
Unamuno ha sido muy trabajado como intelectual. Lo ha sido menos como “santo cultural”, paradigma que aparece en la Universidad entre Islandia y Eslovenia y, entre ambos, aparecen los “celebrity”, una consideración muy desarrollada en el mundo anglosajón y que, poco a poco, va calando hacia el resto del mundo.
Los intelectuales son aquellos “obreros”, que en vez de trabajar con cosas materiales lo hacen con ideas.
A la altura de 1930, a su regreso del exilio, Unamuno aparece ya como un “planeta solitario” dentro del ambiente intelectual español, realmente no es comparable ni equiparable al resto de autores de su generación.
La idea de “santo cultural” viene de la teoría de que hay ciertos escritores e intelectuales que se convierte en una especie de “santos de comunidades nacionales”, que sufre procesos muy parecidos a lo que pudo haber sido la religión, con postuladores y canonizadores. Tras la muerte del autor aparecen una serie de rituales que rememoran y celebran efemérides y hechos clave del mismo.
La “celebridad” es una intersección entre el intelectual y el santo cultural. Hay todo un paradigma de estudio sobre ello donde aparecen: Rousseau, Byron, Victor Hugo, etc., que fueron auténticas celebridades en su tiempo. Hacia ahí se encaminó don Miguel.
Joan Fuster afirmaba que: “Miguel de Unamuno es algo así como la Conchita Bautista de la cultura… Unamuno y Conchita Bautista tienen la ovación asegurada”. (celebridades, sin duda).