Tertulia Unamuniana: Unamuno en Canarias 1910

Unamuno llegó a Gran Canaria el 23 de junio de 1910, como indagador de realidades, no como un invitado ocasional.

Recorrió los caminos, observó los paisajes y conectó con las gentes. En los días de su visita y con los conocimientos que los amigos isleños pudieron haberle proporcionado, concluyó un diagnóstico de los males que preocupaban a los isleños y en los tres discursos públicos que realizó, con el atrevimiento desenfadado de quien se sabe un vocero de “El problema español que es el de todas partes de la patria” y de quien se propone como meta despertar conciencias adormecidas, dejó explotar su palabra: apasionada, sincera, desnuda, que habían de resultar en exceso áridas y hasta violentas para algunos oídos.

Los Juegos Florales serán un pretexto para hablar y conocer la realidad de la isla.

“No me gustan estas fiestas, porque en ellas se profana lo más sagrado que hay en el hombre, la palabra, en su forma más noble que es la poesía”. “En estas fiestas la poesía es literatura de festejo, sometida a una liturgia”. Estas debieran ser algo así como una especie de fiesta religiosa, una eucaristía de la palabra.

En sus discursos tratará temas como: poesía-patria: Si la poesía tiene un valor tan grande es porque revela la patria. En los poetas se forma el sentimiento más íntimo del patriotismo.

El concepto aislamiento fue estudiado por Unamuno en varias ocasiones, por lo que atañe a su relación con la isla y con sus gentes, incluso en la obra de algún escritor o poeta como Alonso Quesada.

Aislamiento relacionado con el conocer y con el que nos conozcan. “No nos conocen decís vosotros, pero ¿Conocéis vosotros?”

Unamuno resalta la importancia del lugar geográfico y estratégico de las islas. Por aquí pasan de España para América y de América para España frutos materiales y espirituales ¿Qué queda de ellos aquí?

En cuanto al problema local lo define como querellas domésticas, luchas por distinciones, y algo de vanidad colectiva… En lugar de acusar a la lentitud burocrática, no estaría de más mirar si no es la lentitud del propio espíritu. Unamuno aconseja a los jóvenes, y les habla con el corazón en la mano: No reduzcas vuestros ideales a la pequeñez de estas islas. No caigáis en ningún género de soñarrera tropical.

Estas poesías florales deben dar para vosotros frutos de acción, frutos políticos.Sed jóvenes, sal de la tierra. No os limitéis a cambiar productos, sino ideas y sentimientos

Para terminar dedica unas palabras a las mujeres y aboga por el papel activo de la mujer en cuanto a amplitud de miras: trato a las mujeres como a los hombres, no las trato como a niños grandes.

Las mujeres tienen más curiosidad que los hombres, les interesan más las cosas. La cuna de la patria es el regazo de una madre, no hagáis del regazo de una mujer la tumba de ella.

Más allá de este mundo pequeño hay un mar mucho más ancho, otras tierras, con gentes que piensan y sienten.

Sus pasos, sus huellas, su mentalidad, marcaron a unos jóvenes que lo tenían por maestros, fue un agitador de conciencias y después de su visita ya no volvieron a ser los mismos.

Unamuno en la vida y obra de Julián Zugazagoitia

Conferencia impartida por Luis María Sala González,  doctor en Historia, periodista y vicepresidente de la Fundación Indalecio Prieto

Julián Zugazagoitia Mendieta, Bilbao 1899, Madrid 1940.
Fue un político, periodista y escritor español de ideología socialista. Miembro del PSOE desde temprana edad, del que llegaría a ser uno de los miembros más destacados. Durante los años de la II República desarrolló una gran actividad política, siendo elegido varias veces diputado en las Cortes Republicanas. También destacó como director del periódico El Socialista, órgano oficial del PSOE. Tras el estallido de la guerra civil española llegaría a ejercer como Ministro de la Gobernación en el gobierno de Juan Negrín.
Al final de la contienda se exilió en Francia pero sería capturado por la Gestapo, tras la ocupación nazi del país galo, y entregado a las autoridades franquistas . Juzgado en consejo de guerra y condenado a muerte, fue fusilado en 1940.

Destacamos de sus escritos Historia de la guerra de España, recopilación de artículos que escribió durante el año que vivió en el exilio, en el periodo que va desde febrero del 39 hasta julio del 40, para el periódico La Vanguardia de Buenos Aires. Se considera como el más valioso de los escritos desde entonces por ningún dirigente de la República.
Zugazagoitia mantuvo una relación temprana con Unamuno, considerándolo un referente intelectual, un maestro.
Entre ellos hay una diferencia de edad muy importante, Julián nació en 1899, cuando Unamuno estaba a punto de convertirse en rector de la Universidad de Salamanca. Su relación es de joven discípulo a admirado maestro. En una carta de 1915, el joven Zugazagoitia escribe una carta a Unamuno donde le dice que le admira profundamente. Algunas cartas están en la Casa Museo Unamuno y fueron publicadas bajo el título de Julián Zugazagoitia. Escritor socialista del 27.
El discípulo le confiesa a Unamuno su devoción temprana por él y le comenta que ha leído varias veces su obra Contra esto y aquello.
En 1924, escribe sobre Los intelectuales y la guerra de Marruecos y menciona a Unamuno. El encuentro personal entre ambos se produce en enero del 24, cuando D. Miguel va a Bilbao a dar una conferencia en el círculo socialista. Donde expresa que el Partido Socialista es la fuerza llamada a regir la patria.
Cuando Unamuno está en el exilio le escribió una carta donde le dice: sepa que todos los obreros se acuerdan de usted.
Desde la Revista Cultural, le rinde también tributo a Unamuno dedicándole la portada.
El 1 de mayo Unamuno está en Madrid, participando de la manifestación, del brazo de Indalecio Prieto y Largo Caballero.
Julián Zugazagoitia, está contento de que Unamuno esté en las Cortes , pero ve claro que el intelectual no va a jugar el papel que corresponde más a los políticos.
Destaca el individualismo de Unamuno y dice:  “A D. Miguel le aterra la masa, quiere conservarse solo”.
En un momento dado se rompe la admiración de muchos años por parte de Zugazagoitia, pero en el 32 cuando se estrena la obra El otro, Julián escribirá un artículo elogioso sobre la misma.
El 17 de marzo de 1937, recogerá en el Socialista un reconocimiento póstumo a Unamuno escrito por Antonio Machado. El reconocimiento más claro a Unamuno lo hará en el prólogo de su obra cumbre, Historia de la guerra de España, considerado como el mejor libro de la guerra civil.

Fotos: Luciano de Dios ,Elena Díaz, Daniel Álvarez

Profesor Unamuno

Francisco Blanco en su conferencia ”El profesor Unamuno”, nos ha introducido en el maestro Unamuno y sus avanzadas ideas sobre educación y los estudiantes, en la vida cotidiana de Miguel de Unamuno como docente de la Universidad de Salamanca, actividad que inició en 1891, tras  aprobar las oposiciones como profesor de Lengua Griega, y que siempre cultivó con entusiasmo y dedicación.

Para el “maestro vocacional”, como define el conferenciante a Unamuno, era “deber del maestro” el inspirar afición en sus discípulos, hacerles amar el estudio, por lo que pronto se convirtió en un profesor admirado por ellos. Unamuno llevó su vocación docente más allá de las aulas, en sus discursos, artículos y obras, con el fin de remover las mentes de las personas. A través de los recuerdos de varios de sus alumnos, nos hemos acercado a un hombre apasionada por la enseñanza y más humano que nunca.

Una vez más Blanco Prieto, con el rigor que le caracteriza, ha derribado algún que otro mito, como que D. Miguel faltaba a clase, debido a sus muchos compromisos, nada más lejos de la realidad, como quedó demostrado por el conferenciante. Siendo D. Miguel además,
paradójicamente, uno de los profesores que menos faltó a su deber en las aulas.

Francisco Blanco fue presentado por la directora de la Casa Museo Unamuno Ana Chaguaceda.
Gracias a la Casa Museo Unamuno por abrir una vez más las puertas de su casa a esta asociación.

Francisco Blanco Prieto: Presidente de Honor de la AAU

El 18 de mayo, los miembros de la Asociación de amigos de Unamuno, tuvimos una comida de fraternidad en la que quisimos agasajar a nuestro presidente saliente y dar la bienvenida a la nueva presidenta de Amigos de Unamuno.

Estas son las palabras que Elena Díaz Santana, pronunció en ese acto, donde nombramos a Francisco Blanco Prieto Presidente de Honor de la Asociación Amigos de Unamuno de Salamanca. Palabras para el Presidente de Honor:

Esta asociación fue creada por Francisco Blanco Prieto junto a los socios fundadores de la misma, que lo acompañamos en este proyecto que él definía como ilusionante, y que se hizo realidad en noviembre de 2014.

Así presentaba él mismo la asociación a la sociedad salmantina: “Aspiración que llevamos tiempo cocinando en los fogones de la esperanza con desmedido entusiasmo, incondicional entrega y vocación de servicio, para llevar en volandas al más grande intelectual que ha tenido el Estudio en sus ochocientos años de historia, hasta el último rincón de la ciudad, sin esperar a cambio otra cosa que satisfacción por el empeño común que emprendemos.…con la intención de congregarnos a la sombra del maestro para recibir ejemplo de su testimonio vital, complacencia en su obra literaria, certificación de su honrado compromiso político y aceptación de su entrega intelectual”.

Mucho ha sido lo que hemos trabajado durante estos nueve años de andadura . Con un presidente como Paco, llevando el timón unamuniano, ha sido fácil. También es éxito suyo saber rodearse de un buen equipo, al que ha enseñado, con su ejemplo, lo que es la honestidad, el rigor, la capacidad de trabajo, la fidelidad a los ideales, el valor de la amistad, como un verdadero maestro, Da vértigo hacer un recorrido por las actividades que esta asociación ha realizado en sus años de andadura. Todas nuestras actividades se han caracterizado por el rigor y la seriedad en la consecución de los objetivos de la asociación.

Paco ha sabido traer a Salamanca a los mejores y más entendidos en Unamuno, como profesores de distintas universidades españolas y algunas del extranjero, así que podemos decir que la asociación cuenta con un prestigio grande, cuyo eco suena también fuera de la ciudad del Tormes. A partir de ahora, la asociación cambia de Presidente, pero seguiremos contando con su labor inestimable, su asesoramiento, y buen hacer unamuniano.

Como dijiste cuando se creó la asociación, la suerte está echada, pero continuaremos trabajando con voluntad, ilusión y entusiasmo en este proyecto común que es promover y difundir la vida, obra y pensamiento de D. Miguel. El listón está muy alto, pero con la Junta Directiva que tenemos y que tú has sabido cuidar, seguro que se mantendrá en el lugar que ahora ocupa. Te lo debemos, nos lo debemos.
Para mi es un honor sustituirte en el cargo, por lo que pondré todo mi empeño en cuidar el legado que hemos construído juntos, para seguir sintiéndonos orgullosos de pertenecer a la Asociación de Amigos de Unamuno y sigamos honrando su buen nombre, contribuyendo a que se conozca a D. Miguel más y sobre todo mejor. Por tu dedicación, afán de servicio y tarea ejemplar para con esta Asociación y por unanimidad, creemos que eres acreedor del cargo de Presidente de Honor y de esta placa que lo acredita.

Niebla en el cine: adaptación y metaficción

Niebla es una novela-nivola de ideas, basada en la abundancia de monólogos y diálogos. Es una novela que podemos definir como de metaficción en la que Unamuno, su creador, aparece en la obra para encontrarse con el personaje. En un mundo en que lo visible deja de verse con claridad y aparecen otras realidades, en este ambiente de niebla y confusión es por donde se mueve Augusto Pérez, el protagonista de la obra.

Augusto es un personaje casi anodino que se enamora de Eugenia, al no ser correspondido por ésta y desesperado quiere suicidarse, para ello va a hablar con el autor de un ensayo que había leído sobre el suicidio que no es otro que d. Miguel. Esto es lo innovador en la novela, y es que el autor de la misma se pone a sí mismo como personaje dentro de la obra y se convierte así, también él en personaje. Augusto le cuenta su vida y problemas, pero de sus vicisitudes, el autor sabía tanto como él, por este motivo Augusto se asusta, tiene miedo. Podemos decir que en la conversación entre Augusto y Unamuno, d. Miguel hace elpapel de Dios y Augusto Pérez el de criatura. Éste recibe la noticia de que no existe, sino que es un ente de ficción. No sabe si está despierto o soñando. Cuando Dios no sabe qué hacer con sus criaturas las mata. Unamuno recrimina a Augusto: Tú agobiado por tus problemas has querido suicidarte, no puedes suicidarte, pues para que uno pueda matarse es menester que esté vivo y tú no existes más que como ente de ficción, no eres más que un producto de mi fantasia, no eres más que un personaje de nivola, ese es tu secreto.


En la conferencia de Pedro Javier Pardo, hemos podido visualizar películas en las que aparece el tema de la metaficción, en la que el autor es un personaje más de la película. Os invitamos a ver la conferencia grabada en vídeo, para conocer las películas conque nos ilustró nuestro conferenciante, una de ellas, Los Otros de Amenábar, en el que personaje de ficción y creador mantienen un diálogo de carácter existencial donde podríamos reconocer los mantenidos por Unamuno y su personaje en Niebla.